sábado, 5 de octubre de 2013

Laclau: "En 1983 hubiera votado por Alfonsin porque representaba el corte mas real con el pasado dictatorial"

En el último programa de EL PUENTE, Leopoldo Moreau mantuvo un dialogo extenso con el reconocido intelectual Ernesto Laclau, doctor en Historia dedicado a la filosofía política, donde se tocaron diversos temas como la situación actual de los países latinoamericanos y la recuperación democrática.

A 30 años de la recuperación democrática, el doctor en Historia discípulo de Eric Hobsbawm reflexionó sobre la manera en que se llevo a cabo el proceso: "En Argentina fue donde el corte ha sido más radical en una serie de aspectos. Por  empezar, la ruptura con el pasado dictatorial ha sido más nítida que en cualquiera de los países latinoamericanos. En otros países la transición ha sido sumamente tenue. El caso chileno es el estereotipo. Allí no se hablaba del corte con el pasado sino que se hablaba de reconciliación nacional. Esto condujo a una transición que en el campo de los derechos humanos fue muy tímida y lenta".

Además, agregó: "Yo en  1983 hubiera votado por Alfonsin porque representaba el corte más real con el pasado dictatorial".

Para Laclau, la división de una sociedad es la condición de una democracia, y de esa manera lo expuso en EL PUENTE: "Para que el proceso democrático pueda avanzar es necesario que la gente se encuentre frente a opciones claras que van a presentar necesariamente una división política y social. Así, proyectos distintos de país se van a ver confrontados uno con el otro.El juego democrático mismo conduce a esto. Cuando no hay posibilidad de elección, es cuando existe un pensamiento único y la gente empieza a tener un desencanto con el juego político y a retraer su participación. No se trata de crear antagonismo por el antagonismo mismo sino que haya distintos proyectos de país que se presenten con claridad."

Según el teórico político, en la década del 90  “hubo un serio peligro de que eso ocurriera. Más cerca en el tiempo, eso es exactamente lo que está ocurriendo en Europa hoy en día. Estamos en una situación en que entre los partidos socialdemócratas y los partidos liberal conservadores no hay una diferencia notoria.

Respecto a la situación actual de los países latinoamericanos, Laclau expuso: "En los sistemas políticos siempre hay una cierta tensión entre dos dimensiones. La primera, la horizontal, que es la incorporación de nuevas demandas sociales y la aparición de nuevos actores que empiezan a estar presente en el espacio público. Sin esta dimensión horizontal no hay posibilidad de avance democrático. Del otro lado esta la dimensión vertical, la hegemonía. Frente a la expansión horizontal de demanda social, se tienen que fijar objetivos políticos bien claros y delimitados. Si esto no ocurre, esta protesta inestructurada comienza a dispersarse rápidamente. Yo creo que en los sistemas políticos latinoamericanos se ha logrado un cierto equilibrio entre estas dos dimensiones. En cambio, en Europa estas dos dimensiones están tendiendo a distanciarse una de otra."

Frente a la pregunta de Moreau sobre su visión del radicalismo hoy,  Laclau respondió: "Lo veo muy desgastado. No están habiendo movimientos de renovación sumamente profundos. El suyo es una de las pocas excepciones a esa regla general. Lo que me preocupa del radicalismo es que no consigue ubicarse con una posición definida en el panorama político".



  

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